Esa mañana no me dio tiempo para despedirme de mi madre ni de desayunar tuve que salir corriendo como unas cuatro cuadras para llegar a tiempo para abordar el bus, casi tropiezo con la banqueta llegando a la parada del bus no podía dejar de pensar sobre como seria la preparatoria ya que no conocía a nadie, por andar de boba tope con la espalda de alguien solo pude oír un quejido mire para ver con quien me había topado, era un chico, se dio la vuelta creí que me iba a derretir en ese instante tan solo con ver esos ojos azules como el mar ese cabello cayendo sobre sus hombros, esa piel pálida y esos labios rojizos...espera en que estaba pensando en ese momento, estaba tan sorprendida que no me había dado cuenta cuando me pregunto mi nombre hasta que la chica detrás suyo me vio y dijo-¿Cómo te llamas?- con un acento algo extraño, como no iba a ser extraño solo con tan solo verla me di cuenta que era de Asia, mas bien Japón para ser exactos, -Loretto- dije tartamudeando sin dejar de admirar al chico-yo me llamo Yuriko, ¿Eres nueva verdad? no te había visto antes- se acerco a mi con una rara expresión en su cara, pero yo aun seguía enbobada viéndolo a él -Lindo nombre- respondió él con un tono muy dulce, como cuando el hermano mayor le habla a su hermana menor para hacerla sonreír, - Gracias y si soy nueva- maldita timidez que no me dejaba contestar bien,- Yo soy Sebastian, espero que te guste este lugar no quisiera que una bella chica como tu se fuera- sentí que mi cara se encendía al escucharlo y mas cuando con unos de sus brazos me rodeo la cintura y con la otra tomo me mentón, estaba tan cerca su rostro que hasta sentí su respiración en mi cara-Te pareces a mi hermanita- dijo en tono de broma-¿Qué?-grite sin querer, me soltó y se rió tanto que hizo que mis esperanzas cayera al suelo, me parezco a su hermana en ese momento no creía tener una oportunidad con él.
Era el primer día en su nueva escuela. Conocería a nuevas personas, de un pueblo claro ne donde se conoce hasta el nombre de las moscas. No estaba tan emocionada en tener amigas pero su madre quería que socializara. Clara su mejor amiga a quien dejo en su antigua escuela, era la única amiga que tenia. A quien extrañaría, la abordar el bus vio a muchos adolescentes quienes la recortaban de arriba a abajo, Yuriko y Sebastian le indicaron que se sentara con ellos en la parte trasera del bus. Todo se silencio al subir una chica de cabellos negros y mirada atemorizante, detrás suyo venía otra chica que no era de la preparatoria. Traía uniforme de la Academia de señoritas de la Iglesia Cristiana. El chófer hizo caso omiso de la chica. Las dos jóvenes se sentaron juntas, Loretto no podía creer que podía temer tanto de ellas. -¿Quiénes son?-pregunto Loretto con preocupación -La de cabello negro es Prisca y la otra de cabello Castaño es Fernanda, ella es de otro Colegio pero como queda cerca la dejan ahí-contesto felizmente un chico de enfrente -Hola mi nombre es Henri no soy de tu instituto- contesto el rizos castaños volteándose 180 grados de su asiento -Soy del...-lo interrumpe Yuriko -Es el Colegio de hombres de la misma Iglesia que Fernanda-.-Y también Pastor- Sonríe el ojiverde. -Hey la vi primero- refunfuño Sebastian.
